Nuestra participación en el proyecto CloudFlow

El proyecto europeo Cloudflow tenía como objetivo desarrollar una plataforma de cálculo en la nube desde la cual pequeñas y medianas empresas puedan ofrecer servicios avanzados de ingeniería, tales como CAM (Computer-Aided Manufacturing) o CFD (Computational Fluid Dynamics). Este proyecto europeo forma parte de la iniciativa I4MS (ICT Innovation for Manufacturing SMEs) lanzada por la Comisión Europea en 2013. I4MS identifica cuatro sectores fundamentales para la transformación digital en las empresas: servicios de simulación en la nube, tecnologías láser, robótica industrial y sistemas ciberfísicos (realidad aumentada, internet de las cosas).

Cloudflow, además de proveer la plataforma para la prestación de servicios de ingeniería en la nube, requería de una serie de experimentos en los que se demostrase la funcionalidad y viabilidad de dicha plataforma. nablaDot lideró uno de esos experimentos en compañía de Biocurve S.L. y el BIFI, Instituto de Biocomputación y física de Sistemas Complejos de la Universidad de Zaragoza.

Este experimento consistió en incorporar la simulación de fluidos al proceso de diseño de los intercambiadores de calor de las calderas de Biocurve. Esta PYME aragonesa fabrica calderas de condensación de biomasa, siendo el intercambiador de calor (patentado) una de las partes fundamentales de dichas calderas.

Para Biocurve era inviable incorporar la CFD a su proceso de diseño debido a los requerimientos de esta tecnología. Durante el proyecto, nablaDot, con la colaboración del BIFI, adaptó el paquete de software libre OpenFOAM para la simulación del intercambiador de calor de Biocurve y lo integró en la plataforma de cálculo en la nube de Cloudflow. Además, automatizó el proceso de simulación (generación de la malla, selección de modelos matemáticos, introducción de los datos de operación, cálculo numérico y post-proceso de los resultados), facilitando el uso del software CFD, y formó a Biocurve en el manejo de la herramienta de simulación desarrollada.

Como resultado, el personal de Biocurve prepara la geometría del intercambiador de calor con software de CAD, accede a la aplicación web desarrollada para ellos, introduce los datos de operación y el archivo con la geometría y, simplemente, ejecuta el proceso. Al final del cálculo numérico, Biocurve recibe un informe, generado automáticamente, con los resultados de la simulación. De esta forma, Biocurve, una empresa simplemente con ordenadores de escritorio y haciendo uso de software estándar para CAD ha podido incorporar la tecnología CFD (intrínsecamente intensiva en el uso de recursos computacionales) a su proceso de diseño.

El experimento ha sido un éxito, como se puede comprobar en la página web inicial de Cloudflow (Optimizing heat exchanger design of biomass boilers through CFD), donde aparecen siete casos de éxito seleccionados entre los 20 experimentos realizados en Cloudflow, y en el video mostrado a continuación, que describe brevemente el proyecto y tres de los principales casos de éxito (puedes ver el nuestro a partir del minuto 2:30).

Gracias al experimento, Biocurve ha conseguido reducir el tamaño del intercambiador de calor de su caldera de 25 kWth en un 30%; además, el tiempo para sacar una nueva caldera al mercado se estima que con esta nueva herramienta se reducirá de 1 año a 8 meses. Debido a la reducción de tiempo  y del número de prototipos en el proceso de diseño, se estima que se ahorrarán en torno a 23.000 € en cada nuevo proceso de diseño gracias al uso de la herramienta CFD desarrollada. En este link se pueden encontrar datos más detallados de los impactos técnicos y económicos generados durante el proyecto.

Muchas empresas se encuentran en la posición de Biocurve antes de participar en Cloudflow con nablaDot. La incorporación de la CFD a tu empresa es posible. Contacta con nosotros y estudiaremos la forma de hacerlo posible.

Translate »